7 sencillos consejos para una buena postura al volante

Conducir durante un largo periodo de tiempo puede provocar molestias al conductor, tales como dolor y lesiones de espalda, dolores musculares, óseos y articulares. La buena noticia es que algunas técnicas pueden ayudarle a corregir una mala postura al volante y evitar así lesiones graves.

Todos los conductores de vehículos pesados saben que estar sentado al volante todo el día supone un desgaste para el cuerpo, que provoca molestias en el cuello, la espalda, los hombros, los brazos, las muñecas, los dedos, las piernas y los pies, y pone en peligro la capacidad de hacer su trabajo.

Aunque los vehículos son en ocasiones la causa de las lesiones de los conductores, los conductores con una mala postura también tienen un mayor riesgo de sufrir lesiones graves. Más aún, si se ven envueltos en una colisión.

Para corregir una mala postura al volante y evitar estos riesgos, eche un vistazo a estos 7 consejos:
 

Apoye la espalda

Acerque el coxis al respaldo del asiento tanto como sea posible. Deje un espacio de dos a tres dedos entre la parte posterior de sus rodillas y la parte delantera del asiento. Además, ajuste el ángulo del asiento entre 100 y 110 grados para ejercer la mínima presión sobre la espalda. Si el asiento está colocado demasiado atrás, le obligará a inclinarse hacia delante, lo que le causará dolor y le adormecerá los dedos.
 

Evite sentarse demasiado cerca del volante

Según diversos estudios, los conductores con el pecho más cerca del volante tienen muchas más probabilidades de sufrir lesiones graves en la cabeza, el cuello y el pecho en impactos frontales y traseros.
 

Ajuste el reposacabezas

La parte superior del reposacabezas debe situarse entre la parte superior de las orejas y la cabeza, tocando sólo la parte posterior de la cabeza cuando se está sentado cómodamente. El reposacabezas también es fundamental para reducir el riesgo de lesiones graves en caso de colisión trasera.
 

Utilice los reposabrazos

Los reposabrazos evitan que los brazos cuelguen durante mucho tiempo. Para mejorar la ergonomía, deben estar alineados a la altura de los codos y doblados en un ángulo de unos 120°. Si los brazos están excesivamente estirados, pueden producirse dolores de hombros y cuello.
 

Utilice el apoyo lumbar

Ajuste el apoyo lumbar regulable de su vehículo (utilizando los reguladores de subida y bajada) para sentir una presión uniforme desde las caderas hasta los hombros. Si su vehículo carece de soporte automático, una almohada lumbar o incluso una toalla enrollada pueden ayudar.
 

Ajuste los retrovisores del vehículo

Evite la tensión en el cuello ajustando correctamente los espejos retrovisores y laterales. La posición correcta es aquella en la que se puede ver el tráfico de detrás sin tener que girar el cuello.
 

Haga descansos y estire las piernas

Incluso con la mejor postura de conducción, la fatiga aparece inevitablemente cuando se conduce durante largos periodos. Por ello, haga descansos con regularidad: aparque con seguridad en una parada de servicio o en otro lugar designado para salir del coche y estirarse o incluso dar un pequeño paseo a fin de reducir la probabilidad de sufrir calambres y dolores musculares.

En general, tener una postura de conducción adecuada beneficia a los conductores en general, ya que reduce significativamente el dolor de espalda y los problemas de columna. Además, este cuidado adicional de la postura se traduce en un mayor bienestar para los conductores y en una garantía para las empresas, que a menudo pierden mano de obra y dinero debido a los problemas de salud de los conductores relacionados con una mala postura al volante.